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sábado, 5 de noviembre de 2011

JOSÉ EUSTASIO RIVERA


Nace en Neiva Colombia en l889, y muere en Nueva York en l928. Maestro normalista y doctor en derecho por la Universidad Nacional de Bogotá. Congresista, inspector del gobierno en explotaciones petrolíferas del Magdalena e integrante de la comisión delimitadora de frontera entre Colombia y Venezuela.
La experiencia como comisionado limítrofe lo condujo a la selva de su país donde se inspira en su creación literaria, cimentando las raíces de su infancia y la fantasía de su juventud.
En 1921 se edita el libro de poemas “Tierra de Promisión” que le dio gran realce nacional, pero fue su novela “La Vorágine” la que lo catapultó a la fama como clásico de la narrativa realista pre – mágica. Esta obra se ha considerado como la gran novela de la selva Latinoamericana.
Habiéndose convertido en un símbolo de su país por su obra “La Vorágine”, como poeta fue bastante deslumbrante, aunque no se conoce por este extraordinario talento. Menciono algunos poemas de su obra poética: Esta noche, Grabando en la Llanura, En un bloque saliente, Con pausados vaivenes…, Mientras las palmas tiemblan, Soy un grávido río, Sintiendo, Cantadora sencilla, Vibradora de garra, En la estrellada noche, etc. Se observa en el nombre de la poesía, la influencia de la selva Colombiana, y sí nos adentramos en sus letras, igualmente nos regodea en su dimensión.
ESTA NOCHE

Esta noche el paisaje soñador se niquela
con la blanda caricia de la lumbre lunar;
en el monte hay cocuyos, y mi balsa que riela
va borrando luceros sobre el agua estelar.

El fogón de la prora, con su alegre candela,
me enciende en oro trémulo como a un dios tutelar;
y unos indios desnudos, con curiosa cautela,
van corriendo en la playa para verme pasar.

Apoyado en el remo avizoro el vacío,
y la luna prolonga mi silueta en el río;
me contemplan los cielos, y del agua al rumor

alzo tristes cantares en la noche perpleja,
y a la voz del bambuco que en la sombra se aleja,
la montaña responde con un vago clamor.

SOY UN GRÁVIDO RÍO...

Soy un grávido río, y a la luz meridiana
ruedo bajo los ámbitos reflejando el paisaje;
y en el hondo murmullo de mi audaz oleaje
se oye la voz solemne de la selva lejana.

Flota el sol entre el nimbo de mi espuma liviana;
y peinando en los vientos el sonoro plumaje,
en las tardes un águila triunfadora y salvaje
vuela sobre mis tumbos encendidos en grana.

Turbio de pesadumbre y anchuroso y profundo,
al pasar ante el monte que en las nubes descuella
con mi trueno espumante sus contornos inundo;

y después, remansado bajo plácidas frondas,
purifico mis aguas esperando una estrella
que vendrá de los cielos a bogar en mis ondas.

sábado, 29 de octubre de 2011

ESTRELLA DEL MAR


Se ve el cabezo en la ecuórea
bañado de gozo por rayos de maría
que se eleva majestuosa con su nimbo,
cubriéndola, como sus pétalos al lirio.

Es la madre del creador e intercesora
que clama al cielo por la masa pecadora,
para que el padre bueno entre a redimir
al hombre, que al faltar a ley, tiene que morir.

Penden de su aureola rayos con resplandor,
haciéndola Bondad Divina como al Creador,
y el peregrino al descubrir la estancia

se inclina y orante en reverencia
rinde tributo, ¡ah, y amor!, en altamar
a la reina del cielo y estrella del mar.

4 de enero de 1991

sábado, 22 de octubre de 2011

MANUEL ACUÑA NARRO


Estudiante de medicina y poeta Mexicano, nace en 1849 y fallece en 1873 a la edad de 24 años. Hijo de Francisco Acuña y Refugio Narro. Estudió en el colegio Josefino de Saltillo y en 1865 se traslada a México al colegio San Ildefonso a estudiar matemáticas, latín, francés y filosofía. En enero de 1868
inicia estudios en la escuela de Medicina y se radica en el cuarto número 13. Compartió en este sitio con los escritores jóvenes de la época: Juan de Dios Peza, Manuel M. Flores, Augusto F. Cuenca, Gerardo M. Silva, Javier Santamaría, Juan B. Garza, Miguel Portilla, Vicente morales, entre otros.
Inicia su carrera literaria en 1868 escribiendo una elegía a la muerte de su compañero Eduardo Alzúa. Funda en compañía con Agustín F. Cuenca y Gerardo Silva y otros intelectuales, la sociedad literaria “Netzahualcóyotl”, dando a conocer sus primeros versos. Todos los trabajos presentados allí fueron publicados en la revista “El Anáhuac” en 1869 y en un folletín del periódico “La Iberia”. En 1971 se estrenó “El Pasado”, drama de su inspiración.
Rosario de la Peña fue la mujer que estuvo más cerca de él, y la historia deja entrever sin afirmarlo porque el poeta tampoco dejó rastro de esto, el peso sobre su estado de ánimo que terminó con su muerte trágica al consumir cianuro potásico. Rosario despertaba por igual loca pasión de Acuña, el deseo de Flores, la senil adoración de Ramírez y el cariño devoto de Martí. Con su poesía, estos cuatro hombres ensalzaban a Rosario.
Obra poética de Manuel Acuña Narro:
Ante un cadáver, una limosna, adiós a México, Misterio, Nada sobre nada, un sueño, amor, pobre flor, Nocturno a Rosario, hojas secas, a la patria, a un arroyo, lágrimas, un sueño, los beodos, historia del pensamiento, el ruiseñor Mexicano, yo sé por qué es, a rosario, la felicidad, entre otros poemas.

NOCTURNO A ROSARIO

I
¡Pues bien! yo necesito
decirte que te adoro
decirte que te quiero
con todo el corazón;
que es mucho lo que sufro,
que es mucho lo que lloro,
que ya no puedo tanto
al grito que te imploro,
te imploro y te hablo en nombre
de mi última ilusión.

II
Yo quiero que tú sepas
que ya hace muchos días
estoy enfermo y pálido
de tanto no dormir;
que ya se han muerto todas
las esperanzas mías,
que están mis noches negras,
tan negras y sombrías,
que ya no sé ni dónde
se alzaba el porvenir.

III
De noche, cuando pongo
mis sienes en la almohada
y hacia otro mundo quiero
mi espíritu volver,
camino mucho, mucho,
y al fin de la jornada
las formas de mi madre
se pierden en la nada
y tú de nuevo vuelves
en mi alma a aparecer.

IV
Comprendo que tus besos
jamás han de ser míos,
comprendo que en tus ojos
no me he de ver jamás,
y te amo y en mis locos
y ardientes desvaríos
bendigo tus desdenes,
adoro tus desvíos,
y en vez de amarte menos
te quiero mucho más.

V
A veces pienso en darte
mi eterna despedida,
borrarte en mis recuerdos
y hundirte en mi pasión
más si es en vano todo
y el alma no te olvida,
¿Qué quieres tú que yo haga,
pedazo de mi vida?
¿Qué quieres tú que yo haga
con este corazón?

VI
Y luego que ya estaba
concluido tu santuario,
tu lámpara encendida,
tu velo en el altar;
el sol de la mañana
detrás del campanario,
chispeando las antorchas,
humeando el incensario,
y abierta allá a lo lejos
la puerta del hogar...

VII
¡Qué hermoso hubiera sido
vivir bajo aquel techo,
los dos unidos siempre
y amándonos los dos;
tú siempre enamorada,
yo siempre satisfecho,
los dos una sola alma,
los dos un solo pecho,
y en medio de nosotros
mi madre como un Dios!

VIII
¡Figúrate qué hermosas
las horas de esa vida!
¡Qué dulce y bello el viaje
por una tierra así!
Y yo soñaba en eso,
mi santa prometida;
y al delirar en ello
con alma estremecida,
pensaba yo en ser bueno
por ti, no más por ti.

IX
¡Bien sabe Dios que ese era
mi mas hermoso sueño,
mi afán y mi esperanza,
mi dicha y mi placer;
bien sabe Dios que en nada
cifraba yo mi empeño,
sino en amarte mucho
bajo el hogar risueño
que me envolvió en sus besos
cuando me vio nacer!

X
Esa era mi esperanza...
mas ya que a sus fulgores
se opone el hondo abismo
que existe entre los dos,
¡Adiós por la vez última,
amor de mis amores;
la luz de mis tinieblas,
la esencia de mis flores;
mi lira de poeta,
mi juventud, adiós!

sábado, 15 de octubre de 2011

DIVINIDADES MARINAS


En la maravillosa llanura del ponto
divisase Nereo, Forcis y Taumante,
Naciendo como el sol en el orto
vagan en la ecuórea, trashumante.

Y Ponto amante de su madre Gea
Engendró también divinidades marinas:
Hembras... a Ceto y a Euribia,
Y todas resplandecen, como rosmarinas;

ellas soplan, y al deslizarse, el ulular
es su aullido. Vagarosas van rondando
y sutil estela en la mar van dejando.

Son entre la mitología, dioses divinos;
y en el espacio, símil al catavinos;
y en el orbe, su aspecto es el de vagar.

Medellín, 18 de febrero de 2008

sábado, 8 de octubre de 2011

GUILLERMO VALENCIA CASTILLO


Poeta y político Colombiano, Popayanes, nacido en 1873 y muerto en 1943. Modernista, conservador, de ascendencia española y acaudalada. Hijo de Joaquín Valencia Quijano y Adelaida Castillo Silva. Quedó huérfano a los diez años de edad. Por ayuda de su hermano mayor estudió en el colegio de San José De La Salle en Medellín. Luego, Estudió en el seminario de Popayán y Filosofía y Letras en la Universidad del Cauca.

Educado por sacerdotes franceses, quienes le enseñaron griego, latín y francés, lo cual le permitió conocer los clásicos de la literatura universal. De esa cultura clásica surgió su primera tendencia poética, denominada parnasianismo, que encabezan los antiguos escritores griegos y latinos.

Contrajo matrimonio con Josefina Muñoz Muñoz, payanesa, con quien tuvo cinco hijos, entre los que destacaron Guillermo León, que fue Presidente de Colombia, y Josefina, primera mujer en ocupar un ministerio y una gobernación en la historia del país.

La ley 80 de 1943 declaró monumento nacional la amplia casona donde vivió y murió, hoy denominada MUSEO NACIONAL GUILLERMO VALENCIA, y en cuyo panteón reposan los restos mortales del Maestro.

A los 21 años fue secretario de hacienda en el cauca y a los 23 años ingresó a la política. Fue diplomático en Suiza, Francia y Alemania; participó de las misiones diplomáticas en Brasil, Chile y Perú. Jefe civil en el Cauca y gobernador del departamento; senador de la república; candidato dos veces a la presidencia del país, derrotado ambas veces. Gran orador, político discutido y discutible y excelente poeta.

En la poesía se le reconocen tres etapas: En la primera se orientó hacia el parnasianismo, en la segunda el simbolismo francés y en la tercera el modernismo. Su poesía, aún siendo musical y plástica, es fría pero elegante. Entre 1896 y 1898 compuso su libro original de versos “Ritos”. En 1952 se publicó su obra poética completa. Antes en 1929 se había publicado “Catay” poemas chinos, traducidos al español en prosa francesa.

Entre sus mejores poemas se encuentra, “Los Crucificados”, “Anarcos”, “Hay un Instante”, “San Antonio y el Centauro”, “Job” (soneto a la muerte de su esposa), “La Parábola del Foso”, “Mis Votos”, “Post Bellum”, “Canto a Popayán” (su poema más popular), etc.

Fue amigo de Baldomero Sanín Cano y de Alfredo Buess; además de hacerse partícipe en el grupo de “La Gruta Simbólica” (grupo literario de la época).

En 1898 deja el congreso y viaja a París como secretario de la legación Colombiana ante Alemania, Francia y Suiza, dirigida por el embajador, general Rafael Reyes. Allí conoce a Rubén Darío (poeta Nicaragüense) y se hace amigo de éste.

El poeta y crítico literario Rogelio Echavarría, describe a Valencia, “Este aristocrático – por sangre y cultura – hijo epónimo de Popayán y su blasón más deslumbrante, es sin embargo uno de los más discutidos poetas hispanoamericanos, desde sus primeros “Ritos” (nombre de su entera obra poética personal) hasta las páginas de su madurez en las cuales se destacan sus formidables discursos y sus afanadas traducciones de Goethe, Víctor Hugo, Baudelaire, Mallarmé, Oscar Wilde, D’Anunzio, Verlaine, Maeterlinck, Flaubert, Stefan, George, entre otros. Su obra poética fue originalmente publicada así: Poesías, Bogotá, 1898; Ritos, Bogotá, 1899; Londres, 1940; Sus Mejores Poemas, Madrid, 1926; Catay, poemas orientales, Bogotá, 1929; Obra Poética Completa, Madrid, 1948; Antología, compilación de Germán Espinosa, 1989, y muchas – incontables – ediciones. La polémica sobre la vigencia de su obra no se cierra; mientras otros tratan de reivindicarla con calor tardío”.

A LA MEMORIA DE JOSEFINA
I
De lo que fue un amor, una dulzura
sin par, hecha de ensueño y de alegría,
sólo ha quedado la ceniza fría
que retiene esta pálida envoltura.

La orquídea de fantástica hermosura,
la mariposa en su policromía
rindieron su fragancia y gallardía
al hado que fijó mi desventura.

Sobre el olvido mi recuerdo impera;
de su sepulcro mi dolor la arranca;
mi fe la cita, mi pasión la espera,

y la vuelvo a la luz, con esa franca
sonrisa matinal de primavera:
¡Noble, modesta, cariñosa y blanca!

II
Que te amé sin rival, tú lo supiste
y lo sabe el Señor; nunca se liga
la errátil hiedra a la floresta amiga
como se unió tu ser a mi alma triste.

En mi memoria tu vivir persiste
con el dulce rumor de una cantiga,
y la nostalgia de tu amor mitiga
mi duelo, que al olvido se resiste.

Diáfano manantial que no se agota,
vives en mí, y a mi aridez austera
tu frescura se mezcla gota a gota.

Tú fuiste a mi desierto la palmera,
a mi piélago amargo, la gaviota,
¡y sólo morirás cuando yo muera!

sábado, 1 de octubre de 2011

HUMILDE REHALERO


Yo soy un rehalero de tus virtudes:
Tu prudencia, con que juzgas rectamente;
Tu justicia, con que das lo que corresponde;
Tu fortaleza, con la cual siempre perseveras;
Tu alegría, con la que tranquilizas la conciencia;
Tu templanza, con la que moderas los placeres;
Tu perseverancia, con la que al caer te levantas;
Tu sobriedad, con la que dominas la arrogancia.
Por eso y mucho más en mi rebaño,
Te he aceptado como humilde rehalero.

Medellín, 29 de marzo de 2011

sábado, 24 de septiembre de 2011

JOSE MARIA PEMAN PERMARTÍN


Español, nacido en Cádiz el 8 de mayo de 1897 y fallecido en el mismo lugar el 19 de julio de 1981, a la edad de 84 años. Hijo del abogado Juan Gualberto Pemán y Maestre y de la señora María Pemartín y Carrera Laborde Aramburu. Estudió el bachillerato en el colegio del Oratorio de San Felipe Neri de Cádiz. En Sevilla estudió derecho y se graduó en Madrid con la tesis “Ensayo sobre las ideas filosófico-jurídicas de la República de Platón”. Lector y escritor por naturaleza:

No voy de la gloria en pos,
Ni torpe ambición me afana,
Y al nacer cada mañana
Solo le pido a Dios:
Casa limpia en que albergar,
Pan tierno para comer,
Un libro para leer,
Y un Cristo para rezar…

Activista monárquico, orador, articulista, escritor, dramaturgo y poeta. Fue rigorosamente clásico y grecolatino. A muy temprana edad muestra su calidad poética, a los 14 años compuso NOCTURNO A MARGARITA.

Participó de los “juegos florales”: Certámenes poéticos en los que se donaban tres premios mayores a las poesías presentadas por temas patrióticos o regionalistas o religiosos o amorosos. Ganó el primer premio en su ciudad natal, cantando en su centenario al beato Fray Diego José de Cádiz. En 1922 en los “juegos florales” de Sanlúcar de Barrameda obtuvo “la flor natural” con su composición El Viático con la que comenzó su carrera de escritor. A los 23 años fue elegido Académico de Número de la Real Academia Hispano Americana de Cádiz, leyendo un discurso sobre la poesía hispano americana.
Su obra: tema costumbrista andaluz (De la vida sencilla, 1923; Nuevas poesías,
1925; A la rueda, rueda, 1929; En el barrio de Santa Cruz, 1931, y otras muchas). Escribió en “El Debate” por autorización de Angel Herrera Oria. También pasó su pluma por el periódico local gaditano “La Información” en donde defendía su paradigma ideológico antiliberal y anti igualitario, construido sobre el tetralema: Familia, Patria, Religión y Monarquía. Cultivó el periodismo político, escribiendo en el ABC de Madrid. En José María Pemán concurrían las tres condiciones que Cicerón exigía al orador romano: “Que instruya, encante y conmueva al auditorio”. En 1933 asume la presidencia del “Ateneo Gaditano”; funda “Renovación Española”, un partido político integrista. Colaboró en la revista “Acción Española”.
A los 27 años se esposó con María del Carmen Domecq Rivero Núñez. Parece que tuvo muchos hijos, según Jorge Guillén, ABC del 20 de julio de 1981, página 10.
Fue intelectual católico escolástico de derecha radical, un Alvaro Gómez Hurtado de Colombia, con la diferencia que él decía que no era político; y por lo tanto, no actuaba a nombre de algún partido. Decía: “Yo hablo en nombre de toda la profundidad de la conciencia de España, que queda más allá de todos los partidos, de todos los distritos. Yo hablo en nombre del viento que entra y sale, como por los ojos vacíos de una calavera, por los huecos de los paredones de los conventos derruidos y las iglesias quemadas, y hablo en nombre del silencio tradicional de la madrugada del Viernes Santo de Sevilla; yo hablo en nombre de las escuelas sin cruces, de los cementerios sin capilla, de las verdades profundas de nuestra tradición”.
Participó políticamente en las Legislaturas de 1927 a 1929; de 1933 a 1935; de 1943 a 1946. Fue miembro activo de los partidos políticos: Unión Patriótica (UP), Unión Monárquica Nacional (UMN), Acción Ciudadana (AC), Renovación Española (RE), FET y de las JONS, y del Movimiento Nacional.
Su numen brillante inspiró dos joyas semánticas del bando nacional: “Cruzada” y “Movimiento Nacional”. Fue apodado “Poeta Alférez, que siente, canta y vive la nueva Epopeya Nacional”. El se definía como un falangista: “Mitad Poeta, Mitad Monje”. Se convirtió en el bardo del Alzamiento Nacional y fomentador de entusiasmos de la zona sublevada a través de su encendido verbo, su poesía de guerra o su prosa soberbia.

En 1940 publicó el Romancero Carlista: Por Dios, por la patria y el rey. Empleaba una métrica clásica y tradicional. De José María Pemán Permartín se pueden llenar volúmenes de literatura; no sólo en lo poético, sino en lo político, literario y en su dramaturgia.

En 1938 publicó en Zaragoza un monumental poema que se llamaba “El Poema de la Bestia y el Angel” de estética de guerra, fue considerado como el paradigma épico de la Nueva España y de la Cruzada. La bestia, simbolizada por un auto blindado; el Angel, simbolizado por un joven soldado, analfabeto, aragonés y cristiano, de escasos 16 años. La Bestia pelea con el Angel. La Bestia muere.

Camilo José Cela, literato joven por ese entonces, escribió refiriéndose a Pemán: “No creo que poeta contemporáneo alguno haya visto más diáfanamente el ser y el sentir de la poesía”.

Desde el 2 de septiembre de 1995 sus restos reposan en la cripta de la Catedral de Cádiz en una tumba reservada para él desde muchos años antes. En su último domicilio Casa Pemán (Plaza San Antonio, 14) hay una Fundación que alberga el legado de Pemán, que incluye más de 16.000 volúmenes de los siglos XVII al XX, así como manuscritos, revistas y correspondencia del escritor gaditano. Acoge además otras exposiciones organizadas por la entidad Cajasol junto con la Diputación Provincial de Cádiz.

En Cádiz existe un teatro al aire libre cuyo nombre es “Teatro de Verano José María Pemán”; un monumento con el busto de Pemán realizado en granito por Juan de Avalos y erigido por suscripción popular. Nombrado hijo adoptivo de Jerez de la Frontera.

Su producción literaria es muy extensa: Siete tomos de la obra completa, 93 comedias y obras teatrales, 28 novelas y cuentos, 43 capítulos de El Séneca, cientos de artículos periodísticos publicados en los principales periódicos y revistas, numerosas conferencias, charlas e intervenciones; no sólo en España, sino en la América Española. Su estilo clasicista, neo populista y modernista.

NOCTURNO A MARGARITA

Hoy que la noche es clara y la acacia es un cántico
Invisible, yo quiero, Margarita, cantarte
Lo más hondo y secreto de mi verso romántico.
Y hoy no ha de ser el arte,
Sino la verdad triste la que haga mi cantar.
¡Y yo sé, Margarita, que he de hacerte llorar!
Tú eres casi una niña y yo soy casi un niño.
Este cariño nuestro, Margarita, es tan puro
que casi no es cariño.
Yo sé que no me entiendes todavía. Te juro
Que llegarán los días en que me entenderás.
Por hoy basta decirte que “querer” no es la paz
De estos largos nocturnos de palabras de miel.
¡Quererse, Margarita, es una cosa
Mucho más triste y mucho más cruel!
Más no llores por eso. Tú serás una rosa
Blanca, siempre en mi vida, más nunca en mi pasión.
Te he querido de un modo tan puro, que besarte,
Margarita, sería una profanación.
No aspires a las cosas imposibles. Tu esposo
Será un hombre de bien, Margarita, que en paz
De Dios, te querrá mucho…
Yo pienso ser famoso.
Haré versos y libros. Tú los entenderás
Como nadie en la vida;
Y sabrás de la inmensa amargura que escondida
Tendrá mi verso.
Un día
Te dirá tu marido: - ¿Qué lees? – Una poesía…
¿De quién? A ver el libro. – Toma. – “José María
Pemán”; ¿No fue tu novio? – Quizá: ¡qué tontería!
El quedará en silencio. Tú sonreirás acaso.
Yo andaré por la vida, lejano, taciturno…
Y alguna vez, muy pocas, dirá alguno a tu paso:
Esa es la novia aquella que le inspiró el Nocturno…

SENDEROS PRIMAVERALES

  Fuente Escondida Iba recorriendo senderos primaverales una tarde florida… Cuando en una fuente escondida hallé, en ensortijados de e...